El Club Taurino de Pamplona está celebrando durante este mes de marzo su 75 aniversario con un ciclo de charlas, conferencias y multitud de actividades en torno a la tauromaquia. El protagonista de uno de esos actos programados, celebrado en la noche del jueves 9 de marzo, fue el diestro Rafael Rubio “Rafaelillo”.
El murciano, despierto y vivaz como acostumbra, repasó en el transcurso de una conferencia su vinculación con la plaza de toros de Pamplona. Sus lazos con la afición pamplonesa se estrecharon en 2007, cuando debutó en la Feria del Toro batallando sin trampa ni cartón con dos fieros toros de Miura. Su entrega, garra y arrojo hicieron que su nombre quedará para siempre grabado en la mente de los aficionados. Miura y “Rafaelillo” han ido siempre de la mano en Pamplona, tardes de miedo, gloria y también drama, como la que ocurrió en 2019, cuando un toro llegado de Lora del Río casi le quita la vida estrellándolo contra las tablas. Afortunadamente, y tras una recuperación dolorosa y lenta, “Rafaelillo” consiguió volver a torear. Su vuelta a Iruña, el pasado año, fue triunfal, saliendo por la Puerta Grande tras lidiar notablemente a una corrida de “La Palmosilla”.
El de Murcia también habló de lo bien que se está portando la Francia Taurina con él, ya que, de momento, solo tiene festejos cerrados en aquel país, tanto en Céret, como en Mont de Marsan y Arlés. “De Francia si me han llamado. Ahí sí han sabido valorar lo que conseguí el año pasado”
Sobre su posibilidad de volver a Pamplona, el torero dijo que el 14 de julio no va a poder ser porque torea en Céret, pero que hay siete fechas más: “Se que hay muchos toreros que quieren torear en Pamplona, pero a mi me encantaría hacer doblete. Vamos a esperar a ver el planteamiento que tiene para este año la Casa de Misericordia”.
Madrid, y su injusta ausencia de los carteles de San Isidro, también salió a la palestra: “No me han llamado. No ha habido negociación ninguna. No ha habido ni opción a acordar nada porque no hubo llamada. No lo ha visto oportuno la empresa”
“Rafaelillo” añadió: “El año pasado fue la temporada más completa de mi carrera y pensaba que este 2023 iba a tener un mejor arranque de temporada, sin embargo, he encontrado el inicio más complicado de mi trayectoria. Asumo las cosas como vienen, tengo paciencia, me preparado aún más en el campo, busco tranquilidad, que me afecte lo menos posible; pero si es cierto que he pasado momentos difíciles en estos últimos meses. Me he hecho muchas preguntas sin respuesta, y es complicado no encontrar el por qué. Eso te hace daño, pero me agarro a mi pasión, al toro, a mi vida, a mi familia, a los momentos bonitos, al cariño de la afición…”
La afición pamplonesa también le preguntó al murciano porque no torea más en su tierra: “Toreé el año pasado un mano a mano muy bonito y muy reñido con Antonio Ferrera y salí a hombros, ahora es pronto todavía, no se están montando muchas corridas aún, aunque puede que toree ahora más adelante”
La charla continuó con la preparación física que lleva el toreo y las secuelas que le quedan después del tremendo percance de 2019. En ese momento apareció en la sala El Doctor Ángel Hidalgo, cirujano jefe de la plaza de toros de Pamplona, y persona, que, junto a su equipo, le salvó la vida a “Rafaelillo”.
La emoción se hizo presente en la sala cuando ambos, torero y galeno, recordaron la figura de otra persona especial, otro salvador de “Rafaelillo”, lamentablemente desaparecido, el Doctor Miguel Ángel Ciga.
Al final de la tertulia, “Rafaelillo” sorprendió a todos donando el traje nazareno y oro, con el que casi pierde la vida aquella fatídica tarde del 2019: “Ese traje no me lo he vuelto a poner. Está conforme me lo llevé de aquí. No he sido capaz de ponérmelo. Nunca he visto el momento de arreglarlo. No me ha nacido. Estando aquí creo que ese traje por todo lo que le debo a esta ciudad, a la Feria del Toro, a esta plaza, me gustaría que estuviese en la ciudad de Pamplona. Lo quiero ceder, donar, para que los aficionados lo puedan contemplar. Es una pequeña manera de devolver todo el cariño que me ha dado esta maravillosa ciudad y todo lo que ha hecho por mi”
El Club Taurino de Pamplona le impuso el pañuelo conmemorativo de su 75 aniversario al torero y le entregó un San Fermín como recuerdo de su paso por este encuentro con los aficionados de Iruña.

@elmuletazo