En la jornada de este sábado el novillero jienense Marcos Linares recibirá el máximo galardón que otorga el jurado de la feria taurina del “Arroz de Calasparra”, el trofeo “Espiga de Oro”. Y lo hará tras ser el triunfador en la edición de 2022, por la votación del jurado y por aclamación de la afición. En una feria de la que quedará para el recuerdo la figura de un joven novillero de Jaén, que bordó el toreo. Hacía años que no se conmovía a la exigente afición local, como lo hizo Marcos Linares.

Hablamos con él después de la jornada de entrenamiento previa a su llegada la ciudad murciana y le preguntamos por lo que sintió la tarde del 6 de septiembre del pasado año, ante el novillo “Oloroso” de la ganadería de “El Pincha”:
Yo nunca he visto una plaza tan entregada como aquel día. Fue una conjunción perfecta de toro, torero y público. Hice la que es hasta ahora la mejor faena de mi vida y tuve sensaciones que no he experimentado nunca.
Una faena además que fue de menos a más, con series rotundas, siendo cada una mejor que la anterior…
Me di cuenta de que el novillo era muy bueno ya desde recibo con el capote. Se le hicieron las cosas bien en el caballo y en banderillas y ya vi que el pitón bueno era el izquierdo. Por eso empecé dándole dos tandas por el derecho, para después volcarme toreando por el lado que sabía que era el bueno del animal.
El descabello se llevó lo que pudo ser premiado con un rabo, dejando el resultado en una clamorosa vuelta al ruedo. Después cortó una oreja, sirviéndole el tremendo poso dejado para repetir el día 8, cortando entonces 3 orejas en la novillada de “Fuente Ymbro”, aunque la que pasará a la historia fue la faena al novillo de “El Pincha”.
Cuando volví a Calasparra a torear la segunda tarde, vi a la gente que había y cómo estaba conmigo y fue impresionante. La mejor forma de agradecer cómo se entregaron conmigo era entregarme yo a ellos y así lo hice.
Unos días más tarde pudo hacer historia, proclamándose triunfador también en Arnedo, algo que ningún novillero ha conseguido hacer el mismo año.
Allí no acompañó el conjunto de la novillada de Talavante. La gente estuvo conmigo, más aún a partir de un quite que hice al segundo novillo. Sonó el pasodoble “Zapato de Oro” y corté una oreja. Si lo llego a matar a la primera quizá hubiesen sido dos, pero aun así me llevo un gran recuerdo y creo que también lo dejé a la afición riojana.

Marcos Linares acabó la temporada toreando 20 novilladas y pasando por las ferias de novilladas importantes, aunque sigue sin apoderado…
No tengo apoderado. Me están ayudando mucho Joselito Rus, Maria Jesús Gualda -ganadera de “El Añadío”-, Carlos Chicote… y les estoy muy agradecido porque he toreado en sitios muy buenos.
Y ahora toca hacer el paseíllo en Sevilla, Madrid, ¿estarán habiendo conversaciones?
Eso irá saliendo…
Porque tomar la alternativa este año parece demasiado pronto…
Bueno, vamos a ver cómo se va desarrollando la temporada.
La cita es este sábado en el restaurante del Santuario Virgen de la Esperanza de Calasparra, en la entrega de premios que organiza el Club Taurino de la localidad.
Me gustaría para terminar aprovechar la oportunidad que me brinda para dar las gracias a la afición de Calasparra. Ya he comentado anteriormente que allí viví la mejor tarde de mi vida. Yo había oído hablar de la Calasparra, de su seriedad, de cómo se viven allí los toros, pero aun así, me impresionó. Nunca lo olvidaré. Muchas gracias.
Gracias Marcos
Pedro M. Mellinas @pedrommellinas
Fotos: José Manuel García “Raspa”