Mañana, en el ruedo inmenso de la plaza de toros monumental de Las Ventas del Espíritu Santo de Madrid, Paco Ureña tiene una cita con la historia. El todo o la nada, o lo que es lo mismo, conservar la etiqueta de figura o volver a la casilla de salida para seguir luchando en esta profesión, la de torero, que es tan bonita como injusta e ingrata.
El torero de Lorca se las verá en solitario ante toros de los hierros de Garcigrande, Puerto de San Lorenzo, Adolfo Martín, Luis Algarra, José Vázquez y Juan Pedro Domecq con la intención de que su plaza, la de Las Ventas, esa que le ha dado el honor de ser “torero de Madrid”, vuelva a rugir con esa intensidad sublime que eriza los bellos de emoción y clamor, al sentir el toreo que interpreta.
Pero para llegar a ese éxtasis es necesario un equipo de personas contrastadas que pongan todo de su parte en la lidia de los astados y que estos lleguen a la muleta con las mayores posibilidades para el triunfo.
Ureña, además de contar con su equipo habitual formado por los subalternos Curro Vivas, Agustín de Espartinas y “Azuquita”, y los picadores Pedro Iturralde y Juan Melgar; ha confiado en los banderilleros Andrés Revuelta, el murciano José Mora y Ricardo Izquierdo más los picadores Juan Francisco Peña y Agustín Collado, para conformar otra de las cuadrillas para el acontecimiento. El otro equipo de profesionales necesario estará integrado por los hombres de plata Rafael Viotti, Fernando Pereira y Francisco Javier Gómez Pascual, y los picadores Manuel Burgos y Alberto Sandoval.
Ejercerán de sobresalientes Álvaro de la Calle y Jeremy Banti.
Carlos López Huerta será el mozo de espadas que contará con la ayuda de Titi Campillo, Miguel Sánchez y Simón Rodríguez.
@elmuletazo